Love yourself

Love yourself

Hace algún tiempo, escribí un post afirmando que había dos clases de personas: las que se comían el currusco de pan nada más comprarlo, y las que son capaces de resistir la tentación.

Bueno, pues cada día voy descubriendo que hay más clasificaciones posibles de la población mundial. Algún día haré una lista…

Step by step my friends!

Y es que el mundo también se divide entre estos dos tipos de personas:

• Las que no soportan tener ni un solo numerico en rojo, en ninguna de las miles de apps que podemos llegar a tener instaladas en el teléfono móvil. Y que sienten la imperiosa necesidad de mirar cada aviso que entra inmediatamente, dejando así como los chorros de oro la pantalla del móvil y la parte superior del mismo, donde se muestra todo aquello pendiente de revisar.

Yo soy de estas, por supuesto. Que por algo soy un eneatipo 8 (para más info sobre este tema puedes ver este artículo: El Eneagrama: Descubre tu tipo de personalidad).

Y sí, me gusta tenerlo todo controladito.

• Y luego están «LAS OTRAS». Las que pueden llegar a tener miles de avisos de facebook, wassap, twitter, instagram, y qué sé yo cuántas más, reclamando su atención con luces de emergencia. Y son perfectamente capaces de aguantar sin mirarlos durante horas y horas. ¡Incluso días! ?

Que yo he visto a mi marido tener más de 400 mensajes de un grupo de wassap sin abrir y permanecer impasible. Sin mostrar curiosidad alguna por ver lo que decían. Sin un deseo incontrolable de despejar ese circulito que está pidiendo a gritos:

¡Pínchame por Dios!

Mí no entender.

Seré maniática y todo lo que tú quieras, pero me puede el ansia viva de saber que tengo cosas pendientes de resolver. ¿Y si es algo urgente? ¿Y si por fin tenemos gobierno en España?

¿Y SI SE ESTÁ APROXIMANDO UN APOCALYPSIS ZOMBI Y NOS PILLA EN BRAGAS???

Y todo por no estar atentos a lo que tenemos que estar. Hombre, por favor.

De todas formas, también tengo que reconocer que este tipo de personas viven más felices. O menos estresadas, eso seguro. Aunque alguna simplemente será una pasota de la vida.

De todo tiene que haber en la viña del Señor, eso es así.

Yo es que soy un manojico de nervios, y me estreso yo sola. Cuantas veces me tengo que decir a mí misma:

Relaja hija mía, recuerda…mindfulness!

Porque claro, somos mucho de “consejosvendoqueparamínotengo”.

La teoría se nos da genial, y contársela a los demás, pues mejor aún. Vamooooos, the fucking masters somos diciéndoles a los otros lo que tienen o deberían hacer en tal o cual situación.

Pero anda que cuando nos toca a nosotros…difícil aplicar ¿eh?

En mi caso, lo bueno es que yo misma me doy cuenta. Y me hago gracia, la verdad. Y me sirve para aprender, claro. Y para darme un puntico en la boca muchas veces ?

Pero también nos puede pasar al contrario. Que nos criticamos, nos juzgamos y nos castigamos a nosotros mismos por cosas que hacemos.

Y ahí nos puede servir pensar si seríamos igual de duros con una buena amiga o con alguien que queremos, si hiciera exactamente lo mismo.

Porque te aseguro que no. Le aconsejaríamos, le diríamos nuestra opinión, pero la trataríamos con cariño sabiendo que está sufriendo o pasándolo mal.

Entonces, ¿por qué nos cuesta tanto no maltratarnos?

Es fundamental la compasión con los demás, pero también es importantísima la auto-compasión.

No te juzgues muy duro, cuanto mejor te hables y te trates, más sana será tu autoestima.

Así que empieza desde hoy mismo a cuidar lo que te dices y….

LOVE YOURSELF! ???

¡Feliz día despeinad@!

(Déjame saber qué tipo de persona eres respecto a los avisos de móvil…así te tengo caladita!?)

PD: Si te apetece comentar algo me encantará leerlo!